jueves, 4 de julio de 2013

Rumbo

Neblina asustaba, anda suspendida.
Una ría agitada, ¿por qué se esconde?
Me empuja a lo acotado, ¿está perdida?
Abrupta en sitios, calzada al norte.

Me soslaya incierto en su fluído aporte.
Flanqueado por emociones, delitos
por perversiones, nada que conforte.
Viviendo intenso y sin ser recíproco.

Siento un grito reminiscente, me ahoga.
Desborda a la manía, a lo único a exhortar
paralelos quejumbrosos, dialoga.

Queda un arroyo y una gran cuenca a guiar,
regresa escondido, en nadie desfoga,
ni un chapoteo, más ya no va ha despertar.

1 comentario: